1. El Consuelo de mi Suegra


    Datte: 18/06/2019, Catégories: Inceste / Tabou Mature, Anal

    ... puedes cerrar la boca - me dijo sonriendo y dando un trago a la cerveza.− Perdóname Mónica - me disculpé tapando con mis manos mi evidente erección bajo mis bóxers.− No, hombre, es un halago para mí que te guste mi bañador y veo que otro se ha alegrado también. - añadió señalando traviesa hacia mi polla que apenas podía cubrir con mis manos.− Gracias Mónica.− De nada, además yo también me siento muy bien viéndote a ti. Tienes un cuerpo precioso y hay que lucirlo.− Gracias.− No, gracias a ti. Por cierto, ¿te gustó mi regalo? - dijo sentándose en la tumbona y haciendo un cruce de piernas asombroso.Me quedé sorprendido cuando me hizo esa pregunta y tardé en reaccionar hasta que ella me aclaró.− Sí, hombre, mis braguitas. Las que te quedaste ayer en el despacho de Ernesto.Casi me da algo al oírle decir eso y respondí azorado sin saber exactamente qué contestar.− Esto… yo… no sabía...Comprendí por fin, que el tema de las bragas no había sido accidental ni mucho menos y que todo era premeditado.− Tenía pensado devolvértelas. - comenté al fin.− No te apures hombre, somos amigos y me hiciste un gran favor. Por mí te las puedes quedar… si es que te gustan.− Sí, esto…− Mira, cuando llegué al despacho de Ernesto estaba mojadísima, porque es que después de estar encima de ti en la biblioteca, me excité mucho, tanto que por eso tuve que darle un buen repaso a mi marido, cómo pudiste comprobar, de modo que puedes quedártelas como recuerdo y como regalo, ya que te las has ganado.Así que ...
    ... resultaba que yo había conseguido ponerla cachonda y tuvo que desquitarse con su esposo. No sé si eso era bueno o malo. El caso es que esa mujer conseguía asombrarme en cada momento y aunque yo pensara que en el fondo estaba haciendo algo malo, mi otro yo disfrutaba de esas sensaciones, de esos juegos y esa provocación continua de mi futura suegra.A continuación, Mónica abrió ligeramente las piernas sin duda para que siguiera disfrutando de ese panorama que ofrecían sus muslos y la braguita que se remetía por sus ingles. Ella comenzó a hacerse una coleta con su cabello, estirando su espalda y remarcando su busto, sabiendo que yo no le quitaba ojo. A continuación se levantó, avanzando lentamente... hizo un largo recorrido por el borde de la piscina y yo seguí su trayectoria detenidamente, observando cómo aquel bañador por detrás apenas podía cubrir su enorme culazo. Casi me muero viendo aquellos andares electrizantes.Ella dio un saltito y se metió en la piscina de cabeza como toda una nadadora profesional. Tras unos segundos emergió del fondo de la piscina mostrando su cabello completamente mojado y su cara resplandeciente llena de gotitas que acentuaban su hermosura. Me acerqué a aquel monumento mientras observaba cómo nadaba alegremente por la piscina.− ¡Vamos, métete! - me animó desde abajo. - ¡Está buenísima!“Tú sí que estás buenísima” - pensé. Después salté de la misma forma en que había hecho ella segundos antes, zambulléndome en aquel agua fresquita para quedar casi pegado ...
«12...252627...50»