1. Tu madre y yo somos unas cerdas, cariño.


    Datte: 03/04/2020, Catégories: Hardcore, Mature, BDSM / Fétichisme

    ... que acababa de hacer, de lo que acababa de compartir con su tío de 55 años. Vertió una jarra de agua en la maceta para disolver el semen de las hojas y la tierra. Regresó a su cuarto para tratar de reflexionar sobre su inmoral comportamiento. Acababa de masturbarse oliéndole el culo a su madre, tras haber presenciado como su tío se masturbaba espiándola. Pero la situación había sido muy morbosa. La puerta del cuarto se abrió de pronto y apareció su tío con el slip, con todo el paquete temblándole con los movimientos.- Ven – le dijo en voz baja -. Se ha dado la vuelta y ahora se le ve todo el chocho.En complicidad con su tío, se levantó y le siguió por el pasillo hasta que llegaron al cuarto, fijándose en cómo también le botaba su culo gordo. Efectivamente, su madre yacía ahora boca arriba, con las piernas separadas y la cabeza ladeada hacia la pared. Mantenía el camisón subido a la altura del ombligo, con sus enormes tetazas acampanadas caídas hacia los costados, transparentándose a través de la muselina. Se le veía todo el chocho, una mancha triangular de un vello denso que bajaba por la almeja hacia la entrepierna y se extendía hasta las ingles.- Mira, la hija puta, se le ve todo el coño – susurró refregándose primero y metiéndose la mano después -. ¿No te la follarías? -. Curro se fijó en la mancha del pantalón del pijama -. Te has hecho una paja, ¿eh, cabroncete?- Me da cosa porque es mi madre, pero me ha puesto muy caliente verla así – reconoció algo ruborizado -. Está ...
    ... muy buena.- Joder, cómo me pone la muy puta. Desde que no me tocan la polla… - lamentó sin apartar los ojos de ella -. Necesito que me toquen… Llevo mucho tiempo sin estar con una mujer -. Se bajó la delantera del slip y descubrió su verga tiesa, gruesa y de venas hinchadas, con el capullo sobresaliendo del pellejo -. ¿Por qué no me das un poquito mientras miramos a tu madre? Hazme ese favor, sobrino, necesito que alguien me toquen la polla o si no voy a reventar…Emanuel, perplejo por la petición de su tío, sonrió de manera estúpida mirando de reojo su polla empinada, con la punta rozando los bajos de la barriga. Jamás había tenido una experiencia homosexual, ni se le había pasado por la cabeza, pero la morbosa situación de espiar a su madre desnuda le provocaba unas sensaciones eléctricas cargadas de placer. Que la mirara un cerdo seboso como su tío le resultaba extremadamente lascivo.- Pero es que aquí – susurró algo nervioso -. Se puede despertar.- Vamos al baño aunque sea, pero hazme ese favor… - le suplicó su tío.- Bueno, está bien, vamos al baño…Caminó detrás de él, fijándose en las nalgas abultadas de su trasero, hasta que se adentraron en el baño. Se encargó de echar el cerrojillo para no correr riesgos. Su tío abrió la tapa de la taza, se bajó la delantera del slip y se puso a mear. Emanuel aguardaba observando cómo caía el chorro dentro de la taza. Su tío volvió la cabeza hacia él.- Qué buena está tu madre, sobrino, imagina mi polla metida en su chocho. Ummm…Terminó ...
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