1. Tu madre y yo somos unas cerdas, cariño.


    Datte: 03/04/2020, Catégories: Hardcore, Mature, BDSM / Fétichisme

    ... sujetó para secarle el capullo. Después, Curro se levantó, se puso el slip y abandonó el baño sin decirle nada. Emanuel se aseguró de que todo estaba limpio de semen. Los pegotes flotaban en el interior de la taza. Tiró de la cadena y se lavó bien las manos. Cuando regresó a la habitación, el muy cerdo se había vuelto a tumbar y se había quedado dormido. Se vistió deprisa y media hora más tarde salió de la casa. Había quedado con su novia para desayunar fuera. Se encontró con su novia Adriana en una cafetería. Era una chica muy mona. Alta, delgada, culo pequeño y redondito, pechos pequeños y picudos, bastante duritos, y una melena larga y rizada de color negro, con ojos verdes y labios gruesos. Era una chica simpática y en cuanto al sexo bastante abierta, de hecho con su novio había probado incluso la penetración anal, no tenía inconveniente en mamársela, ver pelis pornos con él, navegar por Internet o dejar al descubierto sus fantasías eróticas o sus pequeñas travesuras, como cuando era más joven y espiaba a su padre para verle el pene. Le gustaba que la miraran y le gustaba provocar, como muchas veces hacía con el jefe de su padre, un viejo verde al que se le iban los ojos cada vez que la veía. Y Emanuel estaba al tanto de sus jueguecitos. Solían compartir esos secretos íntimos. A pesar de su actitud ardiente, jamás se había desmadrado y tanto uno como otro siempre habían sido fieles. Pero trataba el sexo como un tema natural y divertido.- ¿Qué tal con tu tío? Ya está en ...
    ... casa, ¿no? – le preguntó a Emanuel.- Calla, menudo espectáculo. Iba a contártelo ahora.- ¿Y eso? – se sorprendió - ¿Qué ha pasado?- Bueno, de película. Primeramente me acordé de ti cuando le vi ayer, desnudo, en mi habitación. Duerme en la otra cama.- ¿Te acordaste de mí? – sonrió -. ¿Y eso por qué?- ¿Te acuerdas cuando me contaste que tenías fantasías con hombres maduros y un poco gordos?- ¿Es gordo?- Tiene una buena barriga, y peludo, madurito, muy macho, como a ti te gustan.- Era una fantasía, ¿eh?, no sé yo si a la hora de la verdad me atrevía con un ogro así…- Pues me puse cachondo imaginándote con él – reconoció dándole un mordisco a la tostada.- ¿Sí? ¿En serio? Serás cabrón -. Le dio un cariñoso manotazo en el brazo -. O sea, que no te importaría que me acostara con un gordo, viejo y peludo.- Es tu fantasía – le recordó.- Ten cuidado, canalla, que como me enfades, me tiro a tu tío.- Jajaja, no serías capaz.- No me tientes – le retó ella -. ¿Te gustaría verme follar con él?- No sé, amor, me he puesto muy cachondo esta mañana, hasta he estado a punto de hacerle una paja – le mintió, algo avergonzado de contarle exactamente la verdad.- ¿Qué ha pasado? – preguntó asombrada.- Cuando me levanté esta mañana, le pillé haciéndose una paja en la habitación de mi madre, en la puerta…- ¡No jodas!- Mi madre estaba dormida, con el camisón subido y todo el coño y el culo a la vista. Ni se ha cortado, al final nos hemos hecho una paja. La situación era, no sé, me dijo que por qué no le ...
«12...678...57»